El directorio ejecutivo del FMI concluyó la consulta con Uruguay correspondiente a 2021. La evaluación pauta su concordancia con el rumbo adoptado por el gobierno.
La matriz de los diagnósticos y propuestas del FMI, permanece practicamente invariante desde su fundación. Liberalización comercial y financiera, desregulación, apertura indiscriminada, recorte de egresos públicos.
Sus diagnósticos, y recomendaciones guiaron los setenta a caballo de dicataduras militares, “colaborando” en la gestación de la crisis de los ochenta y lo que se llamó la década pérdida. En los noventa, el denominado Consenso de Washington sistematizó los mandamientos neoliberales que definieron la ruta de la mayoría de los gobiernos al sur del río Bravo y se articularon con la crisis de comienzo del milenio.
En la segunda década, la sumisión al FMI, Banco Mundial, se disfrazó con consignas de “cambio”. Temer, Bolsonaros, Piñeras, Macri, con ministros banqueros, fueron algunos de los abanderados de las recetas más ortodoxas.
Deudas externas crecientes, desigualdades obsenas, paquetes de ayudas a grandes corporaciones y empresarios, acompañaron procesos que se desgastaron rapidámente.
Rota, la “vidriera chilena”, procurando nuevas rutas Perú, Bolivia, Honduras, en graves problemas los “ejemplos” brasileros, colombianos, paraguayos, los organismos económicos del imperio intentan presentar a Uruguay como el “modelo” exitoso.
En ese entorno y pese a la enorme cantidad de gente durmiendo en las calles, pobreza, ollas populares, el gobierno oriental, sale un día si y otro también con la complicidad de medios masivos de prensa a propagandear supuestos logros.
Resultados deficitarios hasta para cifras oficiales, no mellan tampoco los aplausos del FMI. El presupuesto proyectaba descenso del PBI del 3.5% en 2020 e incremento del 4.3% en 2021. En síntesis un leve ascenso del indicador al retornar la normalidad. La realidad exhibió una caída del 5.9% en 2020 y el FMI prevee aumento del 3.4 % en 2021. El saldo muestra cifras claramente inferiores al comienzo de la pandemia.
Los salarios reales acumulan descensos durante 2020, 2021 y las pautas para 2002 no son auspiciosas. El desempleo abierto pese a los denominados jornales solidarios en empleos precarios y el momento fúgaz de ocupación laboral de las obras para UPM promedió en el año rangos en el entorno de 9%. Los trabajadores en seguro de paro superan los 40.000.
La deuda pública continúa creciendo de manera alarmante sin contabilizarse la encubierta por fideicomisos y emprendimientos público-privados. Recortes de gasto público, desmantelan centros de enseñanza, servicios de salud, calidad de las prestaciones de entes del Estado.
También es verdad que a algunos “malla oro” les va muy bien. Precios y ciclo de la carne, engordaron billeteras de grandes frigoríficos y latifundistas. Eucaliptus y derivados al igual que la soja gozaron también de precios de exportación superiores a promedios históricos.
Sin embargo estos sectores gozan de todo tipo de privilegios fiscales, merced a la vieja teoría de la copa llena, que derrama a todos los sectores sociales, fundamentada en clave de ciclista, por el gobierno uruguayo.
El informe del FMI, se enfoca casi exclusivamente en lo fiscal y monetario. “Los directores también destacaron positivamente las mejoras del país en sus marcos fiscal y monetario a pesar de los desafíos de la pandemia”.
Las recomendaciones del organismo son las tradicionales aunque la magnitud de la deuda pública promueve mayor velocidad de las reformas. La sintonía con el programa del gobierno multicolor es absoluta.
Reconstruir el espacio fiscal, flexibilizar el mercado laboral, recortar seguridad social y derechos laborales son las recetas más notorias. (…) “De cara al futuro y dadas las pespectivas inciertas y las debilidades estructurales pre existentes los directores enfatizaron la importancia de reconstruir el espacio fiscal”. Una de las claves es “reformar el sistema de pensiones”. ”Dicho en “criollo” reducir costos del sector público sacrificando el futuro de los trabajadores.
Las perlas del collar se articulan en la embestida contra el pueblo.Alentaron a las autoridades a abordar las rigideces del mercado laboral”i (…) acelerar las reformas de las empresas estatales”.
El FMI y los acreedores aplauden. El pueblo pierde.
GOTITAS DE ECONOMIA.
- La faena y exportación de carnes bovinas, baten récords. Sin embargo, el consumo de carne vacuna por habitante, fue de 54.6% kilogramos en 2017, descendió a 52.7 en 2018, 47.9 en 2019 y 45.7 en 2020. Para no recordar las cifras cercanaas a 70 hace medio siglo.
- Una encuesta del INE dce que en el primer semestre del año, bajo la pobreza respecto a 2020. Definiciones cuestionadas basadas en la línea de ingresoii y una encuesta continua de hogares que se realiza con muestras estadísticasiii muy limitadas en su alcance. El último censo global fue en 2011 y no culminó. Las dudas sobre el valor del indicador son muchas.
- La brecha de precios entre Uruguay y Argentina se evidencia en zonas fronterizas. El indicador de precios de frontera que elabora el observatorio económico de la Universidad Católica en noviembre señala que “Para el conjunto de bienes seleccionados y dada la ponderación en la estructura de gasto de consumo de los hogares la diferencia de precios entre Salto y Concordia es de 56.3%”.
- El foro global de transparencia fiscal evalúa los paises en tres franjas. Verde, amarilla y roja según su calificación. A Uruguay lo califica en el grupo amarillo, conjuntamente con otros 31 países. La Unión europea evalúa que el país tiene regímenes nocivos de exención de ingresos de fuente extranjera. Intereses, regalías dividendos, no cumplen con estandáres al respecto.
- En un séptimo ajuste consecutivo Brasil elevó elevó la tasa de interés (SELIC) desde 7.75% a 9.25%. El IPC incrementó 10.67% los últimos doce meses. La finalidad teórica es el combate a la inflación mediante medidas monetarias reduciendo el crédito. Los efectos pueden seer negativos sobre la producción.
- Los presidentes de China y Rusia abogaron por aumentar la participación de las monedas locales en las transacciones comerciales mutuas. El objetivo explícito es lograr mayor independencia financiera.
i El término flexibilidad laboral en la pluma de los escribas neoliberales y fondo monetaristas, es la forma elíptica de plantear la reducción de derechos sociales de los trabajadores.
iiUnos pocos pesos de más o de menos, definen en que lado está el encuestado. El criterio ha sido desplazado internacionalmente.
iiiSe supone que una muestra es una imagen en pequeño de la estructrua global. Si no se conoce bien la población del país es practicamente imposible que la muesra sea adecuada.