En el año 1989 el economista británico John Williamson, sistematizó las principales recomendaciones del Banco Mundial, FMI, Departamento del Tesoro, Congreso, Reserva Federal, altos cargos de la Administración, de Estados Unidos, grupos de “expertos y afines, para los países del sur.
Si bien no incluían mayores novedades respecto a sus recetas habituales, fueron bautizadas con el nombre de Consenso de Washington.
La idea central gira en torno a la expansión de “las fuerzas del mercado”. Apertura a la entrada de inversión extranjera directa, liberalización financiera, mayor apertura comercial, privatizaciones de empresas públicas, eliminación de regulaciones, reformas fiscales con bases imponibles ampliasi, son algunos de las recomendaciones.
Las recetas, se apoyan en caducos supuestos elaborados hace siglos en escenarios muy diferentes a los actuales. Sus cimientos son las hipotésis de “mercados perfectos”, donde decisiones individuales de empresas y consumidores, cada quien procurando maximizar su rentabilidad, conducen a un óptimo que beneficia a toda la sociedad.
El relato suponía que su adopción permitiría a los países de América latina incrementar su dotación de capital, lograr progreso técnico, crecimiento, desarrollo económico y social.
Desde los noventa a la actualidad mucha agua corrió bajo los puentes. La experiencia demostró que los senderos de los adictos al Consenso dejaron una secuela de perjuicios notorios para los pueblos.
Los resultados, están a la vista. Desigualdades obscenas, fugas de capitales, acompañaron procesos en los cuales pese a las banderas de “libre mercado”, los gobiernos afines no escatimaron paquetes de ayudas a grandes corporaciones y empresarios con el silencio de los organismos internacionales.
Frente a la búsqueda de nuevas rutas por los pueblos, el FMI y sus adictos procuran reflotar sus viejos “mandamientos” mediante mil y una caras, en un abanico que abarca los más diversos matices políticos.
Desde nostálgicos de las brutales dictaduras de los setenta, derechas tradicionales hasta ex izquierdistas conversos tornan a presentar la “libertad de mercados” como novedad y supuesta solución a los problemas económicos de los países latinoamericanos.
Los “packings” incluyen banderas de cambios. Uno de los ejemplos más notorios es el de Milei, que pretende disfrazar el viejo neoliberalismo y su pasado, con discursos supuestamente “anti sistema”, mientras reitera hasta las mismas consignas de los noventa incluyendo la motosierra de Lacalle Herrera en Uruguay.
Medios masivos de prensa financiados con mucho dinero por grandes capitales, promueven las nuevas máscaras de las recetas del Consenso de Washington, con la finalidad de confundir a sectores populares que en situaciones desesperadas procuran transformaciones.
Los cambios reales en la economía y sociedad son patrimonio de los trabqajadores y fuerzas populares y deben ir en sentido inverso a los del Banco Mundial y FMI.
GOTITAS DE ECONOMIA
- Los datos del INE sobre el mercado de trabajo registran para setiembre una tasa de desempleo del 8.3%, de sub empleo del 9.2% y de no registro a la seguridad social del 22.4%. Si además sumamos los trabajadores en seguro de paro que se registran como empleados. ¿Cuantos uruguayos tienen problemas de ocupación laboral en Uruguay?
- La recaudación fiscal en agosto según la DGI descendió 3.5% respecto al mismo mes del año precedente. En los 8 primeros meses cayó 2.2% en términos reales.
- El déficit fiscal según datos del INE creció al 4% del PBI en los doce meses corridos hasta agosto.
- Los gastos en defensa de Estados Unidos crecieron 9.2% en 2022 respecto al 2021 y continuaron su senda ascendente en el 2023. Las guerras continúan siendo un gran negocio para muchas empresas.
- En el segundo trimestre del año en curso el PBI de Alemania tuvo crecimiento nulo respecto a los tres primeros meses. Los trimestres anteriores había descendido 0.4% y 0.1% respectivamente.ii
- La capacidad instalada de producción de energía solar en China entre enero y setiembre del 2023 creció 45.3% interanual y la eólica 15.1% iii
iEs decir que recaigan sobre todo el pueblo
iiTomado de Deutsche Welle.
iiiTomado de Xinhua.